Cuando está un helicóptero en el Gran Cañón se puede observar abordo una panorámica muy distinta a la que se tiene de pie mirando hacia los riscos. El helicóptero es obviamente mucho más versátil y abarca mayor distancia; va hacia la derecha e izquierda, desciende y se perciben los cambios de temperatura en los ambientes tan diversos que existen dentro del Cañón del Colorado. Se puede ir cerca del río, surcando las aguas para posteriormente elevarse cientos, miles de pies. De pronto se observa en realidad lo grande que es y se intenta ir más alto, para poder observarlo en su totalidad… es cuando se da cuenta uno que por más que suba el helicóptero, el Gran Cañón es demasiado grande para observarlo todo en conjunto.

Para poder ver la totalidad del Gran Cañón tendríamos que subir mucho más alto. Desde el espacio, se podría observar por completo. Para celebrar el centenario de los Servicios de Parques Nacionales, se tomaron cientos de fotografías desde el espacio por parte de la NASA. El Astronauta Jeff Williams subió al espacio una potente cámara fotográfica para poder realizar la hazaña. La estación espacial va a una velocidad de 17,150 millas por hora, son ¡5 millas por segundo! En la estación espacial se observa un amanecer cada 92 minutos y es la estructura en el espacio más grande que el ser humano haya construido y puesto en el espacio. Tomar fotografías con precisión a esas velocidades requiere bastante paciencia y un verdadero talento.

Al unirse las fotografías se recrea la totalidad del gran cañón. -“Aún desde el espacio”, comentó el comandante encargado, -“requirió de 13 fotografías para capturar sus 277 millas.” El ensamble nos presenta imágenes únicas que ahora podemos admirar en una sola pieza. Desde allí se observa el Lago Meade, la planicie de Colorado y la ciudad de Las Vegas. Jeff Williams se alegra de la madurez que han adquirido las instituciones y recordó como los Servicios de Parques Nacionales comenzaron amenazados por grandes intereses que querían aprovechar las áreas de los parques para beneficio propio, de haberse logrado, tal vez la geografía que se observa del Gran Cañón sería muy distinta. “Mirar los parques desde el espacio nos hace apreciar lo que hoy hemos logrado conservar” comenta, como un logro y un encargo a las generaciones futuras de preservar y cuidar los parques nacionales.

Algunas de las otras cosas que se pueden observar desde el espacio son los montes Himalaya, con 14 picos y más de 26,000 pies de alto. Igualmente, se observa la estructura viviente más grande de la tierra, hecha enteramente de coral; es la gran barrera de coral en las aguas poco profundas de Australia del este. Crecen de manera paralela a toda la costa Australiana y la habitan más de 1,500 especies de peces.

Algo que también se observa desde el espacio, son las islas artificiales de Dubai, fabricadas con islas hechas por el hombre, las islas forman un mapa del mundo. Los ingenieros han anunciado que futuras construcciones de las islas representarán al sistema solar con el sol, los planetas y estrellas.

Las pirámides de Egipto también pueden ser vistas desde el espacio si se utiliza un lente de aumento, todas estas estructuras masivas forman la bella geografía aérea del planeta tierra.

La NASA creó la cámara Sally Ride EarthKAM como una herramienta educativa en 1996. El programa fue creado por la Dra. Sally Ride, la primera mujer de Los Estados Unidos en el espacio. El equipo permite a estudiantes dirigir la cámara a bordo de la Estación Espacial Internacional y tomar fotografías de la tierra desde el espacio. Los estudiantes no perdieron el tiempo y comenzaron a fotografiar sitios significativos del planeta, líneas costeras, cadenas montañosas y claro, el Gran Cañón. Apuntaron sus cámaras y realizaron ellos también sus composiciones fotográficas, en ellas se pueden incluso observar las nubes volando sobre los riscos, la claridad y calidad de las imágenes muestran los avances tecnológicos que se han alcanzado en las últimas décadas.

Otros estudiantes diseñaron con impresoras 3-D una canastilla y la colocaron en un globo de altura unas millas cerca de Arizona en el verano del 2014. El globo subió lentamente, llegando a la elevación que estaría un helicóptero en el Gran Cañón, prosiguió con suavidad su ascenso, cada vez mostrando menor detalle y mayor área. A los 86,558 pies de altura ya estaba en órbita baja, en ella comenzaron a filmar, a lo lejos se percibe claramente, desde aquella altura el Cañón del Colorado. Los estudiantes intentaron subir aún más hasta llegar a los 98,664 pies, que fue el momento en el que el globo ya no pudo más y reventó, precipitando su preciada carga hacia el piso. Gracias a su diseño, las cámaras abordo no sufrieron daño y lograron recuperar los videos. Orgullosos, pudieron demostrar que el Gran Cañón se observa claramente desde el espacio.

El deseo de observar a mayor altura el Gran Cañón no es nueva, el fotógrafo John Flaig se ha especializado en tomar fotografías desde cometas, globos de aire caliente, drones y helicópteros. Su proceso original ha atraído la atención y lo ha convertido en un especialista en su ramo. Él preparó un globo atmosférico para tomar fotografías artísticas del Gran Cañón. –“Es importante proteger el equipo contra el severo frío que se encuentra en la atmósfera alta de la tierra” comenta el fotógrafo. Lanza el globo con helio que conforme sube va expandiendo más y más, hasta que llega el punto que el globo revienta y su equipo cae al piso. Sus fotografías muestran un Gran Cañón que asemeja una serpiente de múltiples tonalidades de café.

Hoy día el costo para realizar este tipo de lanzamientos es económico y muchas personas pueden lograrlo con pocos conocimientos científicos por lo que seguramente veremos más fotografías desde grandes alturas en el futuro. Mientras lo hacemos, nos podemos consolar subiendo a un helicóptero en el Gran Cañón y disfrutar de una paisaje “a la antigua”.